Por: Lic. Mariana Soria Torres

Todos los padres nos tenemos que enfrentar a la decisión de escoger la escuela para nuestros hijos, esperando encontrar la mejor opción para ellos tanto para su aprendizaje como para su desarrollo emocional y social. Algunos padres deciden llevarlos a la escuela que ellos tuvieron de niños, ya que vivieron una grata experiencia en ella, otros al contrario, buscan darles una mejor opción de la que ellos tuvieron.

Tan solo a nivel primaria existen en el Distrito Federal 1,186 escuelas de educación privada y 2,092 públicas[1], esto nos brinda una gran cantidad de opciones para escoger. Sin embargo existen distintos aspectos importantes a considerar al momento de la elección de escuela. Cuando nuestros hijos cumplen 3 años de edad, la Secretaría de Educación Pública estipula que deben ingresar a 1° de preescolar y así iniciar el proceso de enseñanza–aprendizaje. Existen varios puntos a considerar al momento de tomar la decisión que a continuación describo:

• Ubicación: Es importante buscar escuelas que no se encuentren muy lejos de nuestro domicilio, ya que por lo general (si la distancia a recorrer es larga) sometemos a la familia a un continuo estrés por llegar a tiempo, los niños se angustian y en ocasiones se sienten culpa (aunque no es culpa de ellos) al  llegar tarde.
• Precio: En el caso de escoger una escuela particular, hay que considerar los costos de inscripción, mensualidades, gastos adicionales durante el ciclo escolar (por ejemplo, paseos o campamentos), materiales, seguros, uniformes, etc.
• Ideología: La escuela debe coincidir con tus creencias, si no en todo en la mayoría, de lo contrario como padres estarán frecuentemente molestos por diversas situaciones que se pueden presentar, por ejemplo: hay escuelas que promueven alguna religión y otras que son laicas, en algunos colegios permiten a los alumnos usar el cabello largo o pintado y en otras no, en algunas son muy rigurosas sobre los hábitos de higiene y en otras no tanto (por ejemplo las uñas largas), muchas utilizan uniforme (como un símbolo de identidad y de pertenencia a un lugar) y otras promueven que los niños utilicen la ropa que a ellos les gusta, incluso me ha tocado ver niños que van disfrazados en días de clases normales.
• Modelo educativo: Este debe ser acorde a las necesidades de tu hijo(a). Existen niños que necesitan grupos pequeños y de más estructura y otros que no requieren de ambientes tan controlados. Infórmate antes de ir a las entrevistas sobre el modelo educativo, así podrás comprender los términos que utilicen y podrás hacer preguntas sobre el mismo y estar seguros de que es la mejor opción para tu hijo(a).

A continuación describo las características generales de los más comunes:

El sistema tradicional: uno de los más antiguos en nuestro país, se distingue porque el maestro tiene el rol de enseñar el conocimiento y el alumno es un receptor de este, todavía es frecuente en este sistema que los alumnos copien del pizarrón, el docente les dicte o memoricen para los exámenes; sin embargo, en ocasiones incorpora algunas estrategias de otros modelos educativos para favorecer el aprendizaje y la socialización.

El Montessori: se basa en los principios de María Montessori (1870-1952), que se distinguen porque el aprendizaje del alumno es a través de los sentidos, ella decía que el niño tiene la necesidad de actividad, de realidad, de cultivar su inteligencia y personalidad. En esta escuela los alumnos están divididos en tres grupos de edades (de 3 a 6, de 6 a 9 y de 9 a 12 años), lo que genera una interacción entre niños de distinta edad  a la que tienen en otros colegios. Aquí el maestro es un guía que propone a los alumnos desafíos, cambios y novedades, entre otros, y el niño es el responsable de su propio trabajo.

La doctrina constructivista: se basa en la filosofía del pedagogo Jean Piaget (1896-1980), plantea que el aprendizaje se adquiere por medio de un proceso individual de la construcción del conocimiento. Aquí el docente tiene el papel de facilitador, el alumno se involucra en la construcción del aprendizaje; también se promueve que los niños desarrollen sus propias preguntas, tomen posesión de sus propias conclusiones y defiendan su punto de vista con pruebas válidas.

Bilingüe, bicultural o ambos: Es importante definir si buscas una escuela que incorpore ideologías de otras culturas o si quieres que enseñen otro idioma, de ser así cuál y cuántas horas dentro del horario escolar. Por ejemplo, si tienes un hijo(a) con algún desfase en el desarrollo del lenguaje, sería conveniente preguntar a su terapeuta si un colegio bilingüe sería la mejor opción en ese momento o lo conveniente sería esperar.

También, es básico conocer las instalaciones de la escuela, como son los salones, baños, si cuenta con biblioteca, laboratorios, salón de computación, instalaciones deportivas, etc. Además, observa siempre a los alumnos, recuerdo que cuando yo buscaba escuela para mis hijos,  al concluir las entrevistas iba a observar a los alumnos de distintos grados y me daba una buena idea del perfil de niños que había en esa escuela, en ocasiones platicaba con algunos padres de familia y con algunos maestros.

Te recomiendo hacer una lista con tus estándares de lo que sería la escuela ideal para tu hijo(a) y tomar nota en cada entrevista que realices con las características, pros y contras que observes y así ir descartando opciones.

No existen escuelas perfectas; sin embargo, sí puedes encontrar la que mejor se acerque a lo que tú esperas para la educación de tu hijo(a).