Por. Lic Ivonne Coria González  y Mtra. Ligia Olmedo Santillana

Aunque existen muchas herramientas para la estimulación y el aprendizaje, una de las más completas es el cuento ya que organiza y eleva múltiples habilidades lingüísticas y cognitivas.

Los cuentos nos ayudan a desarrollar habilidades en los niños, quienes posteriormente pueden ponerlas en práctica en diferentes contextos. Esto se logra porque el narrar, escuchar, leer o interpretar un cuento al niño este tiene la oportunidad de crear un puente entre el manejo concreto de la información hacia un manejo abstracto (de la imagen a la imaginación).

De este modo el niño desarrolla la creatividad ayudándole a enfrentar sus miedos así como resolverlos y aprender una lección (realizando hipótesis), es decir, el asunto se resuelve sin experimentarlo en la realidad; encontrando posibles soluciones visualizando escenarios y situaciones diversas.

Utilizar el cuento con los niños es muy fructífero porque se pueden abordar diferentes áreas a la vez y enriquecer su desarrollo integralmente.

“El placer de leer es doble cuando se vive con otra persona con la cual compartir los libros”.

(Katherine Mansfield)

A continuación se nombran algunas ventajas que el cuento aporta a las diferentes áreas del desarrollo:

Lenguaje

El niño aumenta su vocabulario.

Da la oportunidad de reflexionar y practicar la comprensión acerca de lo que está pasando en el relato.

                Lleva a imitar algunas palabras, sonidos,  expresiones e incluso diálogos.

Promueve el análisis verbal al resolver preguntas ¿qué es lo que ve?, ¿qué cree que vaya a pasar?, etc.

Se manejan campos semánticos al preguntar ¿qué hace?, ¿dónde?, ¿quién?, ¿por qué? (ubicando verbos, lugares, personajes, causas, etc).

Hay un espacio para describir objetos, personajes o escenarios.

Social-afectivo.

Pueden identificar emociones y a su vez ver las diferencias entre ellas y buscar cómo enfrentarlas.

Promueve el respeto ej: tratar con cuidado los libros, tener limpias las manos al tomar un libro.

Practica imaginariamente la resolución de problemas porque podemos preguntar ¿qué hubieras hecho tú si te encontrarás en la situación de…? Es decir, identifica problemas de los personajes del cuento y encuentra una solución al conflicto que socialmente es funcional o aceptada.

Inicia una conversación llena de confianza relatando cosas cotidianas que suceden y situaciones difíciles que esté viviendo.

Permite hablar de sentimientos, necesidades, interpretaciones o deseos; es común la facilidad de los pequeños para hablar de lo que le pasa al otro y así decir lo que le sucede a él o ella.

Cognición

Estimula la memoria y su intención de expresarse.

Desarrolla el intelecto del niño; contándole una historia podemos lograr que entienda las cosas con mayor rapidez y su cerebro trabaja con mayor certeza (evaluando, comparando, asociando, razonando, etc.).

Establece lapsos de atención más largos.

Promueve realizar hipótesis acerca de lo que puede suceder después incluso de organizar secuencias en su mente.

Refuerza  la capacidad de imaginar y crear (manejando así información abstracta).

Provoca la síntesis acerca de lo entendido.

Da un entendimiento de causas y efectos, así como el manejo de la temporalidad.

Motricidad

                Favorece el conocimiento espacio- temporal.

Emplea la integración sensorial con cuentos de texturas, cuentos móviles, etc.

Propicia la expresión corporal a través de una interpretación del cuento.

Realizar un dibujo o los personajes con plastilina u otros materiales apoya la motricidad fina.

El mayor regalo que podemos dar a nuestros hijos está en nosotros mismos, en nuestro tiempo, en nuestro entusiasmo, en nuestros pensamientos y en nuestros actos de amor y de cariño.

La lectura compartida contribuye no sólo a que padres e hijos se diviertan juntos sino además a que puedan educarse recíprocamente.

En conclusión el cuento le permite a los niños a usar la imaginación, estimular su pensamiento y lenguaje. Además promueve el recrear la vida de los personajes e identificarse con ellos, también nos da la oportunidad de expresar nuestras ideas, sentimientos y emociones.

La lectura no solo proporciona información crea hábitos de reflexión, análisis, entretiene y distrae.

Una aportación más es que la lectura de cuentos enriquece a los niños en diferentes áreas tales como: historia de la humanidad, cultura general, ciencia, costumbres y tradiciones, por lo que el uso del CUENTO genera CRECIMIENTO.

“Lee y conducirás, no leas y serás conducido”.

(Santa Teresa de Jesús)