Recientemente me encontraba en una librería muy famosa y con libros accesibles para todo tipo de público. En el área donde estaban los libros de niños me encontré con una pequeña y agradable sorpresa, una niña de seis años de edad emocionada intentando leer los títulos de los libros diciendo en voz alta y muy emocionada: «¡Mira mamá, este libro es de monstruos! Uy que miedo! Mira abuelo! Este otro es de magos y hadas, ¿Los puedo llevar?» Su madre contenta de ver la reacción de su hija tomo uno de los libros que la niña escogió y lo llevo con ella a la caja.
Mientras, la niña paseaba con su abuelo por la librería, le escuche aún más emocionada diciéndole a su abuelo: «¡Abuelo! ¡Arriba hay muchos más libros!», su abuelo un poco agobiado y cansado, supongo, contesto: «Si, arriba hay más libros, pero arriba hay libros aburridos y sin dibujos, y esos a ti no te gustan», la niña mostro una expresión de confusión que luego pasó a decepción y en silencio continuó caminando con su abuelo.
¿Que significa esto?
Existen en los niños períodos sensibles según la filosofía de María Montessori, en los que comienzan a descubrir y disfrutar la lectura de manera natural. Es esencial estimular de manera adecuada el deseo de los niños por la lectura, y descubrir la forma de ayudarlos a desarrollar una cultura que les permita disfrutar del lenguaje escrito.